Evaluación de la adecuación de los usos agrícolas al territorio. Aplicación a la Comunidad de Madrid
Energía y economía circular
Nerea Morán Alonso · Giau+s - UPM Grupo Investigación Arquitectura, Urbanismo y Sostenibilidad
Andrés Viedma Guiard, GIAU+S; Rafael Córdoba Hernández, GIAU+S; Marian Simón Rojo, GIAU+S
Desarrollo rural y territorio
Ciudades y comunidades, Producción y consumo responsables, Vida de ecosistemas terrestres

En un contexto de crisis ecosocial y de agotamiento de recursos, atravesado por la deslocalización de los sistemas agroalimentarios hacia un modelo de agricultura globalizada, la organización territorial de estos sistemas resulta clave en la reconstrucción de la soberanía alimentaria, herramienta imprescindible para el sostenimiento de la vida y la implantación de una transición agroecológica.
El trabajo que aquí se presenta se enmarca en el proyecto [URB_inT] Estrategias para la transición ecosocial de las grandes áreas urbanas españolas en un escenario de crisis climática y escasez de recursos (PID2021-126190OB-I00), financiado por el Plan Estatal de Investigación Científica y Técnica y de Innovación 2021-2023.
Dentro de este proyecto, se realiza un estudio del territorio de la Comunidad de Madrid que tiene como objetivo desarrollar herramientas y propuestas de ordenación territorial orientadas a la reconexión entre producción y consumo agroalimentario, la recuperación de vínculos urbano-rurales, y la adecuación de los usos agrícolas a los recursos territoriales.
Para ello, en una primera fase de análisis, se construye una metodología (adaptada de Simón Rojo, 2016) que permita cartografiar el nivel de adecuación de los usos agrícolas al territorio que los sostiene mediante la utilización de Sistemas de Información Geográfica y del software EasyData. Esta metodología se compone de diferentes fases que se corresponden con el procesado y la interpretación de las bases de datos de las que disponemos, adecuando la información disponible a los objetivos concretos del trabajo.
En primer lugar, se parte de la caracterización de los usos agrícolas de la Comunidad de Madrid a través del Sistema de Información de Ocupación del Suelo en España de Alta Resolución (SIOSE-AR 2017), agrupando los usos en seis categorías (regadío, herbáceos de secano, cultivos permanentes, prados y pastos, forestal y matorral y sin vegetación) en un doble proceso de asignación de categorías. En la primera fase, se construye una tabla de equivalencias que asigna una categoría a cada combinación de los datos de cobertura y de atributos. Sin embargo, la amplia presencia de suelos con cobertura de uso de cultivos herbáceos (210) sin atributos lleva a realizar una segunda fase de asignación, en la que se construye otra tabla de equivalencias, esta vez utilizando la información desagregada de los rótulos, que hace referencia a las combinaciones concretas de especies vegetales. Una vez categorizados los usos agrícolas, se realiza una evaluación del grado de aptitud de los suelos en función de su clase agrológica, utilizando el Mapa de Clases Agrológicas de la Comunidad de Madrid (2004), que clasifica los suelos considerando factores como su profundidad, permeabilidad, pedregosidad, pendiente o grado de erosión, entre otros. Se asigna a cada clase agrológica un nivel de aptitud (alta, media, media-baja o baja).
Por último, se intersecan espacialmente en SIG las capas del SIOSE-AR 2017 y del Mapa de Clases Agrológicas, de manera que se pueda asignar a cada suelo su nivel de adecuación en función de la combinación de ambas dimensiones. Para ello, se identifican cinco niveles de adecuación de los cultivos y aprovechamientos agrícolas al suelo que los soporta: muy sobreutilizado, sobreutilizado, adecuado, infrautilizado y muy infrautilizado. La obtención de una cartografía de este nivel de adecuación permite analizar el funcionamiento del sistema agroalimentario de la Comunidad de Madrid, localizando tanto los espacios de oportunidad para aumentar una producción agrícola de proximidad bajo criterios agroecológicos como las áreas sobreexplotadas que deben reducir y adecuar su actividad para la protección de los suelos.
Definir una metodología para analizar el nivel de adecuación de los usos agrícolas al territorio que los sostiene, comparando el uso del suelo con la clase agrológica.
Aplicar dicha metodología a la Comunidad de Madrid.
Analizar la adecuación de los usos agrícolas a la calidad del suelo, a escala comarcal.
Agrupación de usos del suelo (SIOSE-AR 2017), en seis categorías: regadío, herbáceos de secano, cultivos permanentes, pastos y prados, forestal y matorral, sin vegetación.
Agrupación de suelos en 4 niveles de aptitud, en función de su clase agrológica (Comunidad de Madrid, 2004): alta, media, media-baja, baja.
Intersección en SIG y asignación de cinco niveles de adecuación: muy sobre-explotado, sobre-explotado, adecuado, infrautilizado, muy infrautilizado.
Para el conjunto de la Comunidad de Madrid, al realizar el cruce entre uso y aptitud con SIG se observa que el 10% de la superficie agraria está sobreexplotada. Sin embargo, esta dinámica no tiene una distribución espacial uniforme. Cuando los resultados se agrupan por comarcas agrarias, los suelos más sobreexplotados se localizan en la Campiña (25% de sus suelos) y las Vegas (15%). En el otro extremo, el área metropolitana tiene un 30% de sus suelos fértiles infrautilizados.