EMASESA y el reglamento EMAS: Un camino hacia la excelencia ambiental
Energía y economía circular
Miryam Judit Amaya Navarro · Emasesa
Agua, Calidad ambiental y salud
Agua limpia y saneamiento

La Unión Europea promulgó, en 1993 el Reglamento (CEE) nº 1836/1993, por el que se permitía a las empresas del sector industrial adherirse con carácter voluntario a un sistema comunitario de gestión y auditorías ambientales llamado Sistema Comunitario de Ecogestión y Ecoauditoría o EMAS (EcoManagement and Audit Scheme). En 2001, realizó la apertura a otras organizaciones o empresas constatando, la eficacia del Reglamento en el control ambiental y en la mejora continua. En este marco, EMASESA, consciente de sus beneficios y partiendo del Sistema de Gestión Ambiental, implantado en 2.007 y certificado conforme a la norma UNE EN ISO 14001:2015, en 2018 se comprometió con la protección del medio ambiente, la transparencia y la difusión del desempeño ambiental al público elaborando una Declaración Ambiental, para adherirse al sistema comunitario de gestión y auditoría ambiental y proceder a su registro EMAS, en el centro de trabajo de Carambolo con los principales procesos que desde allí se realizan de vital importancia para la gestión del agua. Son: Captación, aducción, potabilización y envasado de agua de consumo público, el control analítico de: agua potable, aguas residuales y vertidos, la producción de energía de origen hidráulico y los programas de educación y sensibilización ambiental. Avanzando en la implantación se amplió con la segunda Declaración ambiental en el centro de trabajo PICA en el año 2021 con los procesos allí asociados de manera que, al incluir el diseño y gestión de la construcción de obras hidráulicas, la gestión de movilidad sostenible y el mantenimiento y conservación de redes se completa de una manera amplia la actividad de EMASESA continuando la línea del control y la mejora ambiental. Para EMASESA es evidente los principales beneficios que se obtienen: La obligación de establecer unos indicadores de comportamiento ambiental para analizar y medir el uso eficiente de los recursos, desde una perspectiva de ciclo de vida. Asegura el cumplimiento legal y anticiparse a la aprobación de nuevos requisitos ambientales, lo que minimiza riesgos desde un enfoque preventivo. La implicación de los empleados, y su participación en el sistema de gestión. Este enfoque es propio del Reglamento EMAS desde sus inicios. La rigurosidad al ser validada por un verificador independiente y acreditado constituye una puesta en valor del esfuerzo derivado de la implantación de un sistema de gestión ambiental.
Es un ejemplo de transparencia que es reconocido por todas las partes interesadas, tan importante para una organización como EMASESA metropolitana. Promueve la mejora continua y marcarse objetivos de reducción de consumos, cambios en los procesos, búsqueda de materiales menos contaminantes, etc.. En la línea de la innovación y la mejora ambiental. En esta línea se quiere continuar ampliando las declaraciones ambientales al resto de centros y procesos.
Desde del año 2007, EMASESA implantó el sistema de gestión ambiental basado en la norma ISO 14001 con el objetivo de la protección del medio ambiente, gestionando los riesgos ambientales que puedan surgir del desarrollo de nuestra actividad. Desde el inicio se entendió como una herramienta para la prevención y protección del medio ambiente a la vez que sirve de brazo conductor para cumplir la normativa legal, así como las necesidades socioeconómicas y de innovación que requieran para su cumplimiento.
El rápido avance del sistema de Gestión Ambiental y su implantación en los principales procesos de EMASESA y sus instalaciones asociadas, consiguió una madurez que ha permitido avanzar y ampliar el alcance y certificaciones desde prácticamente su inicio.
Por lo tanto tal y como marca el Sistema de Gestión que se basa en la mejora continua, se hizo el planteamiento de avanzar hacia la implantación del EMAS en la instalación de EMASESA que lleva asociados los procesos tan importantes como
El comportamiento ambiental se valora empleando los principales resultados ambientales del año, comparándolos, si procede, con la legislación aplicable. Con el fin de mostrar la evolución del comportamiento ambiental de EMASESA, para la elaboración de las Declaraciones Ambientales se han tenido en cuenta, cuando ha sido posible, los datos históricos correspondientes a un periodo de 3 años.
Los indicadores básicos se han construido a partir de cada uno de los indicadores específicos en valor absoluto (y según alguna de las unidades indicada en el Reglamento EMAS para cada uno) y relativizados respecto a los indicadores específicos (CIFRA B).
CIFRA A es el consumo o la producción total anual en el ámbito considerado, el valor que el indicador tiene en 2023.
CIFRA R indica la relación entre A/B, el valor que tiene cada indicador en el año entre la cifra de referencia.
Para el centro ETAP El Carambolo la (CIFRA B) es el agua producida en dam3
Para el centro PICA se utilizan dos indicadore
La Estación de Tratamiento de Agua Potable El Carambolo se adhiere al Reglamento EMAS para las actividades de:
• Captación, aducción, potabilización y envasado de agua de consumo público (NACE 2009:36:00 y 82.92).
• Controles analíticos de agua potables, aguas residuales y vertidos (NACE 2009:36:00).
• Producción de energía hidráulica (NACE 2009:35:11).
• Programas de educación y sensibilización ambiental (NACE 2009:85:60)
Una vez confirmada la utilidad y visualizando los beneficios, se decidió implantar el Reglamento a otras instalaciones y procesos de EMASESA, así desde 2020 el Centro de trabajo PICA se adhiere al Reglamento EMAS para las actividades de:
• Construcción de redes para fluidos (NACE 2009:42.21)
• Distribución de agua de consumo público y mantenimiento y conservación de redes de abastecimiento (NACE 2009:36.00).
• Recogida de aguas residuales y mantenimiento y conservación de redes de saneamiento (NACE 2009:37.00).